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Foto: Anthony Zambrano en competencia en los Juegos Intercolegiados.
Anthony Zambrano, la escuela f
Zambrano le dio, este jueves, a Colombia la primera medalla olímpica en atletismo masculino de velocidad. El atleta guajiro se colgó la plata en los 400 metros planos. Esta es su historia.
Prensa Mindeporte
Bogotá, 05 de agosto de 2021. La mañana del jueves 5 de agosto de 2021 quedará para siempre en la retina del pueblo colombiano. A las 7:00 a.m., la figura de Anthony Zambrano, de 23 años, arrodillado, con la mirada puesta en el cielo, sosteniendo con sus manos la bandera tricolor, se hizo icónica. Sumó una medalla más para el país.
Tras el anuncio de salida, Zambrano emprendió una carrera para la que se había preparado desde que sus zancadas empezaron a ser reconocidas a lo largo y ancho del territorio nacional. Por su mente pasaron muchas imágenes de su vida: desde su infancia en La Guajira, donde debió sortear muchas dificultades, hasta la pista olímpica de Tokio, en la que haría historia.
El atleta guajiro aceleró en el remate y, ya casi sin piernas pero con mucho amor propio, cruzó la meta en el segundo lugar, después de Steven Gardiner, de las Bahamas. Los aplausos y los vitoreos retumbaron en los hogares colombianos, sobre todo en los de su natal Maicao, en donde lo vieron correr por sus calles y fueron testigos de su proceso.
Sus números previos a esta final hablaban por sí solos. Logró un registro de 44,87 s en la eliminatoria, la tercera mejor marca, después de Michael Cherry, primero con 44,82 s, y de Isaac Makwala, con 44,86 s.
En la semifinal alcanzó los 43,93 s, que es nueva marca nacional y suramericana. Eso le dio confianza para llegar a la final y quedar en el podio. La primera medalla olímpica para nuestro país en el atletismo masculino.
Detrás de este nuevo logro hay una historia de sacrificio y lucha que empezó en el programa Juegos Intercolegiados Nacionales del Ministerio del Deporte, casi una década atrás.
En 2013, Zambrano, siendo un adolescente, empezaba a mostrar en las pistas del país de qué estaba hecho. Con el escudo de su institución educativa, María Cano, en el pecho, se hizo notar por su velocidad y fue avanzando, poco a poco, hasta subirse a lo más alto del podio de los Intercolegiados, en 2015.
Su talento fulgurante hizo que todas las miradas su posaran sobre él, pues su aparición suponía el relevo generacional en el atletismo colombiano, cuyo máximo logro olímpico había sido con Ximena Restrepo y su mítico bronce en los 400 metros, en Barcelona 92.
Zambrano arrancó su meteórica carrera con un séptimo lugar en el Mundial de Menores de Cali, en 2015. Un año después fue sexto en el Mundial Juvenil de Polonia, ya con el uniforme de la Selección Colombia.
Tras dos años de ausencia, retomó el atletismo e hizo parte de la delegación colombiana en los Juegos Panamericanos de Lima en 2019 y consiguió el oro en los 400 metros.
Después, consiguió el primer puesto en la competencia del relevo 4x400 y se erigió como la figura de Colombia en dicho certamen deportivo. Tras este logro, fue medalla de plata en el Mundial de Doha y segundo en la Liga de Diamante.
Por último, en la válida de Florencia, Italia, fue primero y allí empezó a prepararse hasta llegar a este 5 de agosto de 2021, en el que obtuvo la plata, una gesta que quedará guardad con letras doradas en los libros del atletismo y el deporte colombiano en general.
