La jugadora de 18 años de edad representa a la delegación de Cauca en Quibdó
Prensa Coldeportes
Los octavos Juegos del Litoral Pacífico son tan diversos como entretenidos. Cada jornada es una oportunidad para disfrutar de la fraternidad entre las regiones, pero también es un espacio para identificar a los futuros talentos del deporte colombiano.
El partido de voleibol femenino de este martes en el Coliseo El Jardín fue un verdadero espectáculo. Las delegaciones de Valle del Cauca y Cauca demostraron que a Quibdó vinieron para dejar en alto cada uno de sus departamentos.
Las caucanas llegaron al segundo juego con la ventaja que les dio el triunfo en el primer encuentro frente a las vallecaucanas, pues el sistema del campeonato definirá al campeón en tres enfrentamientos, es decir, estaban a una victoria del título.
Las del Valle se encargaron de emparejar las cuentas y le pusieron más emoción al torneo. Con un 2-0 contundente dejaron para este miércoles el juego definitivo. Durante el partido, además de técnica, contaron con el apoyo incondicional de sus compañeros voleibolistas que con arengas y botellas plásticas como instrumentos las hicieron sentir como en casa.
No obstante la derrota, Vanessa Aragón, proveniente de Timbiquí, Cauca, dejó claro que lo más importante en el deporte y en la vida es conservar la sonrisa. "La alegría es nuestro fuerte, lo que nos caracteriza en mi tierra que es de gente alegre y amable", respondió la jugadora de 18 años de edad. (Escuchar audio)
Su apariencia es tan especial como su juego. Las largas trenzas rojas de su cabello combinan a la perfección con el uniforme amarillo que porta con el 10 en la espalda. "Es el número de la rematadora, de la más potente", argumenta Vanessa, que además de talentosa goza de un físico que envidiaría hasta una reina de belleza.
Su pegada, al igual que su sonrisa, serán las herramientas con las que intentará, en conjunto con su equipo, lograr un triunfo que las lleve a brillar en la capital chocoana y que permita enmarcar una sonrisa tan encantadora como su técnica que poco a poco la acerca a su sueño, ser jugadora profesional de voleibol.