Ministerio del Deporte

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Bogotá, 11 de diciembre de 2024. En un rincón apartado de Río Verde, una vereda tolimense del municipio de Río Blanco, nació una historia de superación y pasión por el deporte. Jonathan Alexander Medina Romero, un joven de 17 años, que hoy es un ejemplo de esfuerzo y esperanza, participando activamente en el programa Escuela de Talentos del Ministerio del Deporte.

Un sueño tolimense que nació en la cancha y se reafirmó en el programa Escuela de Talentos
Un sueño tolimense que nació

Su vida, antes alejada del deporte, estaba marcada por largos años de aislamiento. Jonathan narra cómo, en su pueblo natal, la falta de recursos y apoyo para personas con discapacidad visual lo mantenía alejado de las actividades cotidianas. "Yo me mantenía encerrado, duré 5 años sin hacer nada", expresa. Su mamá, al darse cuenta de la necesidad de un cambio, decidió tomar una decisión radical y se trasladó con él y sus dos hermanos a Ibagué, buscando nuevas oportunidades.

Fue en Ibagué donde se presentó una oportunidad que cambiaría su vida: el fútbol visual. "Un profesor me habló del fútbol sonoro, y pensé que era algo que podía probar", afirma el Para atleta. El profesor Jefferson Devia, quien ha sido su entrenador y guía, fue clave en este nuevo comienzo. Con disciplina y constancia, el deportista comenzó a formarse en el deporte, sintiendo cómo, a medida que pasaban los meses, su vida tomaba un giro inesperado.

El deporte no solo ha fortalecido su cuerpo, sino que también ha fortalecido su mente y espíritu. Jonathan habla con orgullo de cómo ha mejorado su movilidad, su ánimo y, sobre todo, su salud. Además, su participación en el programa Escuela de Talentos ha sido una experiencia de crecimiento personal. "Me siento feliz de estar aquí, de cumplir las metas que nos propusimos. Mis compañeros y yo estamos trabajando duro para llegar lejos", expone.

Con metas claras a corto y largo plazo, Jonathan sueña con ser parte de la Selección Colombia de fútbol visual y representar a su departamento, Tolima, a nivel nacional. Su agradecimiento al programa y a las personas que han apoyado su camino es sincero. "Gracias a Indeportes, al Ministerio del Deporte, a Viviana, al profesor Jefferson, a mis compañeros... a mi madre, por todo el sacrificio que ha hecho por mí", dice Jonathan.

Hoy, Jonathan es un joven lleno de esperanza, dispuesto a seguir luchando por sus sueños. El fútbol, junto con el apoyo de su familia, entrenadores y compañeros, ha sido el motor que lo impulsa a superar cada obstáculo y a mirar el futuro con optimismo. En su camino hacia el éxito, el programa Escuela de Talentos y el apoyo de instituciones como Indeportes y el Ministerio del Deporte juegan un papel fundamental en su desarrollo como deportista y como persona.