El atleta colombiano, que se formó en los Juegos Intercolegiados, le otorgó a Colombia el decimoquinto metal dorado en los juegos que se llevan a cabo en Santiago.
Jesús Miguel de la Hoz, periodista
Santiago de Chile, noviembre 01 de 2023. El destino es ironía, muchas veces por las cosas más simples, grandes sueños se ven opacados y en el atletismo el mal uso de unas zapatillas puede bastar para quedar sin marca mínima para Mundial y para Juegos Olímpicos. Pero Arnovis Dalmero se toma esa ironía con tranquilidad. "Eso no me vuelve a pasar", dice. Pasa la hoja con la sencillez que lo caracteriza y vuela para convertirse en el rey panamericano del salto largo.
Una marca de 8.08 metros, diez centímetros menos del récord nacional que está en su poder, fue suficiente para coronarse en Santiago, para mirar al destino de frente y demostrarle su resiliencia, su capacidad de nunca darse por vencido y tomar lo que le pertenece: el metal dorado en unos Juegos Panamericanos, lo que lo convirtió en el primer atleta masculino del país en lograr una medalla en una prueba de saltos, en la historia de este evento.
Dos intentos buenos le bastaron a Dalmero para que el estadio Nacional de Santiago se rindiera a sus pies y otorgarle a Colombia su decimoquinto oro en estos juegos. Los cubanos Alejandro Parada y Maikel Vidal, quienes se quedaron con la plata y el bronce, respectivamente, con un registro de 8.01 metros, no pudieron hacer nada para frenar al atleta nacional, quien está enfocado en retomar ese cupo olímpico que le fue arrebatado por las zapatillas.
La secuencia que lo llevó a campeón panamericano comenzó en Santa Marta, con Martín Suárez, quien se convirtió en su primer entrenador. Con él ajustó la técnica y su mecánica y su nombre empezó a ganar reconocimiento a nivel departamental como nacional, gracias a su participación en los Juegos Intercolegiados de 2016, en los que participó en la prueba de salto triple y se quedó con la medalla de plata, con una marca de 15.05 metros.
Su primera aparición a nivel nacional lo catapultó al Mundial sub-18 de Nairobi, en el que ganó medalla de bronce, con un registro de 15.89 metros, y de ahí pasó directo a participar con los mayores, en los Juegos Bolivarianos de Santa Marta, en el que terminó séptimo en salto largo. Su participación fue constante en ambas disciplinas, pero con el paso del tiempo, se fue acomodando mejor al salto largo hasta que se convirtió en amo y señor.
Marcas de 7.97, en el Grand Prix Internacional de Ibagué, en abril de 2021; 8.04, en el Suramericano sub-23 de Guayaquil, Ecuador, en octubre de 2021; 8.07 en el Gran Premio Internacional de Brasil, en mayo de 2022 y 8.18 en el Campeonato Nacional de Clubes, en Bogotá, en marzo de 2023 las convirtió en récords nacionales. Fue el primer atleta nacional en superar los ocho metros. Así se fue transformando en un referente de Colombia, de Sur América y ahora de todo el continente. Su carrera apenas comienza.
