Prensa coldeportes
Apenas restan horas para que se consuman los 12 meses del calendario, pero este año no será archivado como uno más. Resultará imposible obviar el mejor de la historia de Colombia. Marcará para siempre un antes y un después y, como tal, deberá trazar el punto de partida para la verdadera transformación de nuestro amado país.
En apenas tres letras se resume el sentimiento reprimido durante décadas en la nación: PAZ. Ese anhelo que ya es una realidad, se convierte en nuestro mayor orgullo y a su vez, en un compromiso inaplazable. De todos depende que perdure y las futuras generaciones lo reciban como un derecho adquirido.
Cuando el señor Presidente de la República, Juan Manuel Santos, me encomendó en mayo la dirección de Coldeportes, sabía que agendaba así una cita con la historia. No sólo al ser la primera mujer en asumir tan prestigioso cargo, también por el momento que vive Colombia y el papel determinante del deporte en él.
Para que estos vientos de paz dejen de ser efímeros y se instalen definitivamente en toda la geografía colombiana, la recreación, la actividad física y el aprovechamiento del tiempo libre también son necesarios. Una tarea que diariamente hemos desarrollado con programas que nos han permitido acercarnos mucho más a las regiones.
Las sensaciones que me produce ver cómo la sociedad colombiana se transforma gracias a Nuevo Comienzo, destinado a la persona mayor, Campamentos Juveniles o Supérate Intercolegiados, son incontables, pero la misión es la misma: trabajar mucho más fuerte para multiplicarlos hasta impactar a la mayor cantidad posible de compatriotas.
Los resultados aparte de alentadores, nos impulsan aún más en ese propósito. Partamos de lo hecho en Rio, donde tanto en olímpicos como en paralímpicos se alcanzaron gestas que, como lo destacó el Presidente Santos, transformaron nuestro pabellón, que ahora es oro, azul y rojo. Semejante honor ya nos compromete a mejorar en Tokio 2020, por lo que ya el proyecto hacia el próximo ciclo está en marcha con los expertos de Posicionamiento y Liderazgo, además de los profesionales de ambos comités.
Con tantas cifras positivas, necesitaríamos de muchas celdas de Excel para exponer el balance a favor, por lo que me permito seleccionar apenas algunas para destacar la labor que desde las distintas direcciones de Coldeportes se viene adelantando. En Supérate Intercolegiados, por ejemplo, se batió el récord de inscritos: 3.300.000 demuestran el crecimiento del programa que ya es cantera de nuestros futuros campeones.
Desde la subdirección se vienen coordinando mesas de trabajo para radicar de nuevo ante el Congreso la Ley del Deporte; en Fomento y Desarrollo, el Grupo de Actividad Física con Hábitos y Estilos de Vida Saludable y Vías Activas y Saludables llegó a las 3.800.000 de personas atendidas, como también son 80 municipios los que se benefician con ‘Deporte, convivencia y paz’ y en Inspección, Vigilancia y Control se aumentaron las prácticas de gobierno corporativo gracias al acompañamiento en la implementación de las Normas Internacionales de Información Financiera (NIIF) a las 58 federaciones y 50 clubes profesionales de fútbol, baloncesto y béisbol.
Otro dato no menos importantes es que antes de que terminara el año, en Recursos y Herramientas del Sistema luego de evaluar 670 propuestas, se aprobaron y firmaron 67 convenios de infraestructura recreodeportiva en todo el país. También gracias a la aprobación de la reforma tributaria y el 4 por ciento a los datos de la telefonía móvil, dispondremos de mayores recursos para seguir apoyando los diferentes programas.
Con mejores escenarios, nuestros deportistas tendrán las condiciones adecuadas para su desarrollo y el país, de paso, la oportunidad de albergar grandes certámenes. En este año, tres marcaron la pauta: el mundial de BMX, el de Fútsal FIFA y los Juegos Sudamericanos Escolares. Aparte de un reto superado, ratificaron a Colombia como destino internacional. De ahí que cerremos con otra buena nueva: el Programa nacional de voluntariado que ha creado Coldeportes para tener personal capacitado y con vocación de sobra que garantice el éxito organizativo.
Nos miran con admiración y respeto, por lo que nuestro compromiso ya trasciende fronteras. Un importante reto asumo, la presidencia la Confederación Sudamericana del Deporte, responsabilidad que implica multiplicar esfuerzos para, entre tantos objetivos, fortalecer la base en la región.
Se ha hecho un buen trabajo, pero debemos mejorarlo bajo una premisa fundamental que se ampara en tres palabras: Colombia, oro y paz. Todas enmarcaron este año en el que no sobra preguntarse: ¿Qué fue lo mejor de este 2016 que despedimos? Difícil en realidad establecerlo, pero sí les puedo asegurar algo: ¡Lo mejor está por venir!