Prensa Supérate Intercolegiados
No sobresale por su estatura porque con sus 1,40 metros se esconde entre la la cantidad de niños, pero sí lo hace por su talento, su coordinación, su elasticidad. Él es Samuel Díez González, un pequeño caleño de 11 años que logró la medalla de plata en la final del Programa Supérate Intercolegiados, lo que representa un logro para él.
Samuel es un niño disciplinado, de hecho le gustó la gimnasia porque es un deporte de mucha dedicación y esfuerzo: "A uno le ponen a repetir muchas veces las cosas, las hagas bien o mal, y eso ayuda para no repetir los errores".
A su edad apenas compite en dos pruebas, salto y suelo pero próximamente tendrá que añadir a su rutina los arzones, barra fija y paralela que tienen una mayor complejidad. "Me va mejor en el salto porque me siento más confiado, en suelo me pongo nervioso y me equivoco, las otras ya las he practicado pero aún me da pánico la barra por la salida con giro mortal", indicó el pequeño.
Pero así como acepta tener miedo, enfrenta sus temores: "Me encanta lo extremo, cada vez que tengo cierto temor lo enfrento y me propongo dejar eso a un lado".
Se siente muy feliz de haber participado en Supérate pues fue su primera vez en estas competencias: "Me gusta mucho viajar y entre más participe aquí, más puedo conocer, es una bonita experiencia".
Su familia lo apoya en todo momento, lo acompañan a sus competencias y sufren con cada salto que realiza. "Mi mamá, Carolina, se pone muy nerviosa y hace caras cada vez que me toca saltar", dice entre risas.
Apenas es su segundo año en este deporte, aún tiene mucho camino por delante pero ve a Jossimar Calvo como su referente, lo observa en videos y toma cosas de él porque dice, lleno de convicción: "Me encantaría llegar a unos Juegos Olímpicos".