EsDePaz une fronteras
Prensa Coldeportes
Kevin Jair Fonseca Colimba es venezolano de nacimiento y hoy hace parte de la larga lista de niños del hermano país, que tuvieron que huir para no morir de hambre, ante un futuro incierto.
Junto a su madre colombiana atravesaron la frontera a pie. El papá de Kevin, por ser venezolano, le tocó quedarse en su patria. Kevin y su mamà, Martha Cecilia Colimba, después de varios días de viaje, llegaron a Ancuya Nariño, en el pacifico colombiano, donde la familia materna, que el joven no conocía aún, los recibieron con los brazos abiertos.
Kevin A sus 11 años Kevin era un deportista sobresaliente, asistía a clases de fútbol en su país natal, entrenaba en la escuela deportiva del Carmelo de Sucre, tres días a la semana. Con mucho talento llega a las Esdepaz aca en Colombia.
Una historia de vida que se rescata gracias a las Esdepaz de Coldeportes
Kevin no solo pudo ingresar a las Escuelas Deportivas para La Paz, implementadas por Coldeportes bajo la direcciòn de Clara Luz Roldán, también al colegio Carlos Albornoz en Ancuya, Nariño donde continuará su formación académica.
Este joven venezolano sueña con seguir los pasos de su ídolos, con ser un grande en el fútbol, acá en Colombia admira y desea conocer a James Rodríguez; por ahora entrena tres días a la semana en horario extracurricular Fútbol de Sala con el acompañamiento de su monitor de Esdepaz en Ancuya, Brayan Alejandro Paredes, quien tiene la fortuna de entrenar a Kevin y a 110 niños de 7 a 17 años, de esta región nariñense.