Defiende el oro colombiano
Prensa Supérate Intercolegiados
Sentirse vulnerable o atacada no son debilidades de la karateca Natalia Bernal, quien demostró su entereza durante su participación en la copa Dimitrova, en República Dominicana, realizada entre el 3 y 10 de julio pasados. La bogotana ganó Oro y Bronce en modalidad Kata y Kumite, respectivamente. Actualmente, es la Campeona Nacional en Kumite de -47Kg. Se alista para la Final Nacional Supérate en el Valle del Cauca.
Con tan solo 15 años, Natalia Bernal Herrera logró colgarse la medalla dorada y una de bronce por su destacada actuación en la Copa Dimitrova de República Dominicana. Moviendo las fibras de sus seguidores, la joven deportista que le ganó a la karateca local afirmó que "cuando gané la medalla de oro fue súper bonito porque sentí que el trabajo que he venido haciendo con mis entrenadores ha sido bueno y valió la pena. Me sentí muy contenta y lo que hice fue disfrutar, porque todo el esfuerzo lo dejé en el combate".
Aparte de ser este año la campeona de la Copa Dimitrova, en el 2014 fue tercera en el Suramericano de Bolivia, y en el 2015 quedó de campeona en el Centroamericano en San Luis Potosí, México. Actualmente es campeona en el programa Supérate Intercolegiados representando a su colegio, María Auxiliadora, sede principal de Barranquilla, ciudad donde vive desde los 9 años, y además hace parte del programa Reserva y Talento de Coldeportes.
El próximo año que cursará el grado 11, la deportista bogotana oro en Kata y bronce en Kumite, aspira lograr la beca del crédito condonable para estudiar Psicología y especializarse en Psicología del Deporte. "Antes no sabía qué estudiar, pero ahora que averigüé una profesión que tuviera afinidad con lo que hago, me parece una gran oportunidad para combinar estas pasiones. Por eso me preparo fuertemente para tener la oportunidad de ganarme el crédito de Supérate", asevera.
Su mamá, María José Herrera, ha sido su mayor apoyo tanto económico como emocional. Es quien más ha creído en su talento y no escatima en detalles a la hora de alagar a su pequeña e hinchar su corazón de alegría: "Estoy muy orgullosa de Natalia, aunque muchas veces no soy la primera en abrazarla cuando baja del podio, siempre estoy ahí para ella… Es algo indescriptible. Verla llorar de emoción por ver, compartir y entrenar con campeones mundiales, fue una recompensa a su trabajo y dedicación con el Karate, el cual practica desde los seis años". -¿Lo que más le emociona de su hija?- "cuando está en el podio y escuchamos el himno de nuestro país".
Finalmente, Natalia les recuerda a los jóvenes la importancia de apasionarse por el deporte: "El karate les va a brindar disciplina, concentración necesaria porque esa es su base y ayuda a ser responsable y a limitar los comportamientos violentos con los demás. Te hace una mejor persona cada día".
