El juvenil de experiencia internacional es la figura del Regional Llanos
PRENSA MINDEPORTE
Yopal, Casanare, 18 de septiembre de 2019 - Con 15 años y 1,90 metros de estatura, Mario Alejandro Flórez ya se perfila como un referente en el voleibol nacional. El estudiante del Colegio José Eustasio Rivera en Saravena, Arauca, ya es un ejemplo dentro y fuera de las canchas. Cuando tenía nueve años se enamoró del balón, ese mismo que ya lo tiene recorriendo el mundo con la selección de Colombia juvenil de voleibol.
"Estaba cerca de la cancha del barrio El Jardín, mientras mi mamá estaba distraída yo miraba al club Centauros entrenar. Fui todos los días y así terminé involucrado en el voleibol", cuenta Flórez. Cuando ingresó llegó al José Eustasio Rivera ya lo precedía la fama, no era un estudiante más, sus nuevos compañeros ya tenían referencia de él y su entrenador Martín, ya sabía con el jugador que enfilaría en su equipo.
En 2016 fue su primera participación en Supérate Intercolegiados, programa que le dio su primera oportunidad en una selección de Colombia al ser parte del equipo que representó al país en los Juegos Escolares Sudamericanos de Cochabamba, Bolivia, en 2017. Desde ese momento, es reconocido en las canchas de voleibol, no solo por su altura, sino por su calidad de juego, que lo llevó a ser parte del equipo nacional sub 19, que participó en el mundial en Túnez recientemente.
Para Martín Mauri, su entrenador, es un honor contar con un jugador como Mario en un equipo, pues representa lo que es un jugador integral y un ejemplo para sus compañeros. "Es nuestro estandarte, tiene experiencias de otro nivel como los Suramericanos y el Mundial Juvenil, es un ejemplo a seguir para sus compañeros", manifiesta el profesor de la institución educativa.
Dentro de la cancha es un líder nato, motivador, pendiente y siempre atento a sus compañeros y ellos de él, lo miman, lo protegen, no hay duda que es el baluarte de Saravena. Óscar Rojas, líbero del equipo y su mejor amigo, afirma que Mario es un compañero sobresaliente y que por medio de su juego, le cambia la imagen a Arauca. "Enaltece el nombre de Arauca fuera de la región, es un orgullo".
Rojas también comenta que en las calles de Saravena ya es un ícono y los niños lo ven como un ejemplo a seguir. Para sus compañeros como para su entrenador, es un orgullo estar al lado de Mario en las competiciones, pues afirman que será un deportista que dará de qué hablar en Colombia.
