La vicepresidenta de la Federación Colombiana de Esgrima analizó el presente de la disciplina en el país
Prensa Coldeportes
El proceso de masificación y crecimiento de la esgrima en Colombia se está dando a pasos agigantados. Por eso, el espaldarazo internacional para que el país reciba el próximo fin de semana el Grand Prix de Espada, evento de primer nivel en el que participará el top 10 del planeta, no es cuestión del azar.
Y es tal su fortalecimiento que este año le apostaron a la inclusión del deporte paralímpico, una gran puerta que permitirá a mediano plazo evidenciar la existencia de un proceso serio y con proyección.
Mariana Vila, vicepresidenta de la Federación Colombiana de Esgrima, analizó en detalle el presente y futuro de la disciplina en el marco del V Escalafón Nacional mayores individual y por equipos y el II Selectivo en silla de ruedas que se realiza en el coliseo de hockey Miguel Calero, en Cali.
¿Con qué frecuencia están compitiendo los esgrimistas nacionales?
Estamos realizando alrededor de 10 escalafones nacionales en el año con el objetivo de que los atletas puedan competir para que logren alcanzar un nivel importante. En Cali tenemos 140 esgrimistas convencionales y ocho paralímpicos, pero la idea es que sean 14 en cada campeonato.
¿Cómo avanza el proceso de masificación de la esgrima a nivel paralímpico?
Felizmente empezamos el proceso este año, es nuestra nueva apuesta, vemos que tenemos un gran campo para darles a los deportistas una posibilidad competitiva que es donde se terminan todas las discapacidades.
¿Y cómo va el fogueo internacional?
Nosotros fuimos muy fuertes hace 20 años y vino un período en el que perdimos protagonismo. Ya nos estamos recuperando. Actualmente hacemos parte del grupo de los mejores de la zona, nos batimos contra México, Estados Unidos y Canadá, sin dejar a un lado a Brasil y Venezuela.
¿A qué le apuntan en el Grand Prix de Espada en Bogotá?
Es algo que soñamos por mucho tiempo. Es una parada mundial. También se realiza en Doha y Budapest. Tener este evento en nuestra casa significa una gran oportunidad para que los maestros, deportistas, árbitros y población en general disfruten de esgrima de primer nivel. Tendremos seis jueces colombianos arbitrando el campeonato y la posibilidad de que 20 más puedan observar enfrentamientos del circuito mundial.
¿Cómo califica el apoyo del Estado y la empresa privada?
Hemos ido creciendo de la mano. Les hemos demostrado a Coldeportes y al Comité Olímpico Colombiano la seriedad de nuestro proyecto y los avances que hemos logrado. Esperamos que ese apoyo sea constante y vaya en crecimiento.