Juegos Nacionales y Paranacionales 2015
Prensa Coldeportes
A la hora de simbolizar son muchos los aspectos para tener en cuenta. Tradiciones, rasgos culturales, valores, y hasta el entorno. De la unión de todas estas consideraciones fue que nacieron la imagen y las mascotas de los XX Juegos Nacionales y IV Paranacionales, que se realizarán en Chocó y Tolima a partir de noviembre próximo.
El emblema inicial está seguido por el nombre de los juegos en su versión 2015. Los colores empleados se encuentran en las banderas de ambos departamentos y son representativos de las características de las dos regiones escogidas para la realización del certamen deportivo más importante de Colombia y que se realiza cada cuatro años.
El logo de las justas fue creado a partir de la conjunción de las letras iniciales de los nombres de los departamentos de Chocó y Tolima, entrelazadas para simbolizar el espíritu de hermandad y amistad entre los pueblos a través del deporte, y en este caso particular de los Juegos Nacionales, cuya esencia precisamente es la convivencia en paz y la inclusión social.
Por su parte, las mascotas son el fruto de la expresión de los chocoanos y tolimenses, quienes participaron con propuestas para, finalmente, elegir por concurso a los emblemáticos personajes que los representarán: Chojuna (Chocó) y Tore (Tolima). Casi que no habría necesidad de explicar a cuál departamento pertenece cada una, pues sus nombres hablan por sí solos.
Chojuna es una iguana verde, animal que se encuentra en las selvas chocoanas. Debido al clima húmedo y abundante vegetación esta región se ha convertido en el lugar perfecto para una especie que además se caracteriza por su actitud tranquila y sociable, un reflejo también de la personalidad del chocoano.
Otro de los motivos para la escogencia como mascota de los Juegos, es una oportunidad para fomentar su conservación. Infortunadamente, este reptil está amenazado con la extinción por la caza indiscriminada y la deforestación que destruye su hábitat.
Del lado de Tolima, su representante del reino animal es el Loro Orejiamarillo, una de las aves más significativas de la cultura tolimense. Se le ve por todo el departamento y tiene estrecha relación con la palma de cera -árbol simbólico de Colombia- debido a que anida, se alimenta y duerme en ella.