PRENSA MINDEPORTE
El ciclista fue la figura de la quinta edición de las justas. Logró una medalla de oro en los 4.000 metros persecución individual.
Bogotá (25 de julio de 2019). Martín Emilio Rodríguez. Un nombre lleno de historia, triunfos y galardones. Una leyenda viviente. Más conocido como ‘Cochise’ por la película La flecha rota dirigida por Delmer Daves, en 1950. Fue el ciclista que le empezó a dar a Colombia un reconocimiento internacional con sus marcas tanto en pista como en ruta: récord de la hora en 1970, campeón mundial en los 4.000 mts persecución individual y ganador de dos etapas del Giro de Italia, entre otros.
Precisamente, en los 4.000 metros persecución individual participó en los Juegos Panamericanos de 1967 realizados en Winnipeg (Canadá), ese fue el regreso de la delegación nacional a estas justas tras faltar a las realizadas en Chicago (Estados Unidos) en 1959 y Sao Paulo (Brasil) 1963. ‘Cochise’ llegó como la gran figura del país puesto que se había coronado en la Vuelta a Colombia en 1963, 1964 y 1966 y también ya había dado muestras de su buen nivel en la pista.
Y no decepcionó. En los 4.000 metros persecución individual, ‘Cochise’ parecía volar con la bicicleta, la pista de Winnipeg fue testigo de su cadencia y la facilidad que tenía al momento que se daba la largada para competir. El ciclista colombiano no tuvo rival y terminó ganando el título de manera contundente, con un registro de 4:58.31, que se terminó convirtiendo en marca panamericana.
Pero ese no fue el único aporte que hizo ‘Cochise’. Postriormente junto con Severo Hernández, Álvaro Pachón y Carlos Montoya se colgó la medalla de bronce en los 100 kilómetros contrarreloj por equipos. Fue una buena presentación la que tuvo el seleccionado nacional y con esfuerzo, entrega y decisión se paró en el último escalón del podio.
Estos Juegos Panamericanos fueron la confirmación para Martín Emilio Rodríguez, quien posteriormente pasó a ser el deportista más importante de Colombia durante muchos años. En su palmarés se destacan los oros en los Juegos Panamericanos de Cali en 1971, campeón americano en 1969 y tres veces campeón bolivariano. Aún se ve a la gente tomándose fotos con él por las carreteras del país. Y él, con su parsimonia y calma, sigue su filosofía: "Hay que complacer a todo el que se quiera tomar la foto conmigo".