Prensa Coldeportes
Al cumplirse un mes de su gestión, el primer mandatario demuestra que se la jugará por los deportistas nacionales y por hacer de Colombia un referente más fuerte a nivel internacional.
Como la selección Colombia que empieza un nuevo camino y con la exigencia de ser cada vez mejor. Como Caterine Ibargüen que da cada paso seguro para luego elevarse entre zancadas sin límite alguno. Como cada pedalazo de los ciclistas en las carreteras europeas que no ahorran gota de sudor. Como el trabajo en equipo de los tenistas Cabal y Farah que siempre los fortalece. Así ha empezado la labor del presidente Iván Duque con el país.
Amparado en el deporte, una prioridad dentro de su plan de gobierno, pero fundamentalmente dándole el valor que le corresponde en su rol de transformador social, el primer mandatario al cumplir un mes de gestión deja en evidencia que se la jugará incondicionalmente por él.
Ya ha disfrutado de los logros de los deportistas nacionales y aparte de reconocer su esfuerzo y dedicación públicamente, los pondera a manera de ejemplo para que el país en todos sus órdenes admire y aplique ese impulso en pro de una mejor nación.
Por eso desde que aspiró a la presidencia, le dio un papel preponderante. Propuso, por ejemplo, impulsar el deporte comunitario con oferta de espacios dignos para la recreación, con parques iluminados, zonas verdes en nuevos desarrollos urbanos y articulación con ligas deportivas locales, para detectar y desarrollar talento tempranamente, además de extender prácticas de la actividad física y luchar así contra el sedentarismo.
De igual manera, se propuso expandir la oferta competitiva para estimular la profesionalización de los talentos deportivos con potencial de alto rendimiento, articulando con el sector privado el uso más eficiente de los recursos públicos del nivel nacional y territorial, para impulsar la participación en competencias internacionales.
Todo ello para trazarse como meta en su administración, triplicar en una década el número de medallas y reconocimientos a nivel internacional. En definitiva, no conformarse con ser potencia deportiva continental, sino ir por más. Evolucionar.
Consciente, además, de los valores que este promueve, el presidente Duque sabe que es herramienta fundamental para una de sus principales luchas: combatir la corrupción. El juego limpio es determinante.
"Vamos a continuar con el proyecto de ley para crear el Ministerio del Deporte", ha reiterado en los talleres de Construyendo país en distintos lugares del territorio, al entender que sería un paso fundamental para que su estructura crezca y se desarrolle mucho más.
El compromiso está. También las ganas por llevarlo a cabo y ni hablar de la planificación para ejecutarlo. En la Casa de Nariño no solo se vive el deporte, se apoya y trabaja por él. Bien lo refleja uno de sus eslogan de gobierno: Todos somos un equipo.