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Con la categoría que le dan sus títulos mundiales, la atleta urabeña se impuso desde el salto inicial, en el que aparte de tomar la delantera empezó a romper los récords centroamericanos que ella misma había establecido en Veracruz 2014, con 14,66 metros.

Es su segundo turno, Ibargüen mantuvo el primer puesto y con una marca de 14,74 batió el primer récord de la noche, pero este duró poco, porque en su tercer salto aumentó su marca y con un 14,79 continuó mostrando su poderío en el estadio Rafael Cotes, de la capital del Atlántico.

Ante unos 3.000 espectadores, la colombiana hizo gala de su estrellato orbital y nunca perdió el primer lugar del salto triple. Por el contrario, la atleta nacional remontó su registro en el quinto salto con 14,92 metros, marca con la que consolidó su oro y que es la mejor del mundo en 2018.

La noche colombiana fue perfecta en el salto triple, pues Yossiri Urrutia se quedó con la medalla de plata, con un registro de 14,48 metros, marca que la puso detrás de su compatriota, para hacer estallar la emoción en las gradas del estadio de atletismo barranquillero.

"Me siento orgullosa de ganar en Barranquilla. Siento un sabor dulce. Le dedico el triunfo a toda Colombia. Estar en mi país y ganar en una competencia de tanto nivel es la cereza del pastel", manifestó la colombiana, en medio de la emoción por su triunfo, en condición de local.

Asimismo afirmó que añoraba hacer los 15 metros en su salto en Colombia, pero "es una barrera difícil, tengo que seguir trabajando para eso, lo importante es que hoy le entrego una nueva medalla al país y todo con la mentalidad de seguir adelante con la mente puesta en Tokio 2020″.