El arquero del Valle se proyecta como guardameta en el balompié internacional
Prensa Coldeportes
El nombre de Brayan Steven Angulo Moreno muy seguramente aparecerá en futuras transmisiones internacionales del fútbol europeo. La carrera de este bonaverense camina a pasos agigantados.
A sus 19 años, el arquero de la delegación del Valle en los VII Juegos del Litoral Pacífico es uno de los más destacados. Sus atajadas han sido merecedoras de repetidos aplausos en la grama sintética de la cancha del barrio La Independencia donde se disputa esta disciplina.
"En este momento juego en la segunda división del fútbol peruano. Ha sido la continuación de un proceso que comenzó en Buenaventura, en los torneos de barrio, que contribuyeron mucho a mi formación", comenta Moreno, uno de los más espigados del torneo.
Es joven, por eso es consciente de que los sueños se pueden hacer realidad y más cuando se trabaja duro para alcanzarlos. Su rutina de entrenamientos, que acompaña con una estricta dieta, empieza a las 8:00 de la mañana todos los días de la semana.
Además de esos aspectos innegociables, su abuela es quien está detrás de sus logros. "A ella le debo todo lo que soy. Desde pequeño me ha guiado, acompañado y aconsejado. Es mi primera seguidora, pero también mi primera crítica", explica Brayan.
En unos años espera conquistar el Viejo Continente. El Barcelona, uno de los mejores equipos del mundo, es adonde quiere llegar con su fútbol y su ilusión. "Quiero jugar en Europa, pero no estaría mal hacerlo primero en el Deportivo Cali", dice el guardameta nacido en Buenaventura pero criado en la capital del Valle del Cauca.
Por ahora, sus atajadas y sus 191 centímetros de estatura son las principales cartas que pone en la mesa para seguir acumulando minutos custodiando el arco de su delegación en el marco de los Juegos del Litoral Pacífico, "una cantera de talentos que nos ofrece una oportunidad enorme de estar más cerca del profesionalismo y que nos permite dar un paso más para alcanzar nuestros sueños".