El ciclismo adaptado para personas con discapacidad es una de las disciplinas que más se practica en Colombia y los resultados internacionales son un reflejo de su desarrollo en el país
Prensa Mindeporte
Bogotá, mayo 11 de 2020. "Cuando me monté a la bicicleta mi vida cambió para siempre: encontré un nuevo rumbo, se convirtió en mi motor para salir adelante. Me renové y sentí que soy motivo de orgullo para mi familia". Ese es el testimonio de Carolina Munévar, quien encontró en el deporte la oportunidad de transformarse y llegar lejos, hasta tocar el cielo de la gloria en lo más alto de un podio.
Así como Munévar encontró en el paracycling el impulso para dejar a un lado su discapacidad y convertirse en campeona del mundo en ruta (CRI Paralímpica categoría C2 en Sudáfrica 2017), en Colombia son cada vez más los atletas con discapacidad que pedalean para superarse.
El ciclismo adaptado es un deporte paralímpico que surgió gracias a los prototipos específicos que desarrollaron a mediados del siglo pasado. En 1960, se crearon para discapacidad física. Posteriormente, surgieron los tándem para los visuales y en los 90 los triciclos manuales para las personas en silla de ruedas.
En Seúl 1988 se incorporó el paracycling a los Juegos Paralímpicos, en la modalidad de ruta y ocho años después, en Atlanta, empezaron las pruebas de pista. Su gobernanza a nivel internacional está a cargo de la Unión Ciclista Internacional, UCI, y es practicado en ambas ramas: femenina y masculina.
Para su práctica se utilizan cuatro tipos de bicicleta: tándem, bicicleta adaptada, triciclo manual y triciclo. Está dividido en diferentes categorías, según la clasificación funcional: B, que corresponde a la limitación visual; C, para limitaciones físicas y parálisis cerebral; H, discapacidades físicas y parálisis cerebral; T, discapacidades físicas y parálisis cerebral.
En Colombia, la federación nacional de ciclismo es la entidad que lo controla el Paracycling y dentro de los máximos logros que ha alcanzado este deporte para el país, sobresalen las dos medallas de bronce en los Juegos Paralímpicos de Rio 2016, con Edwin Matiz y Diego Dueñas; además de los títulos mundiales de Dueñas (scratch), Alejandro Perea (en scratch y del kilómetro -con récord orbital- en la categoría C2) y Javier Serna (en tándem, prueba de ruta).