PRENSA MINDEPORTE
Cartagena, 30 de noviembre de 2019. - Su trabajo es estar pendiente de que la cancha del Coliseo Northon Madrid, lugar en el que se lleva a cabo la competencia de voleibol de los Juegos del Bicentenario, Bolívar 2019, se encuentre en condiciones impecables para que las atletas expongan su mejor nivel. Junto con Natalia Gaviria hay otros 12 voluntarios, todos con la misma misión: hacer que el partido avance en las mejores condiciones.
"Tenemos diferentes labores como son el rapidito, recoge balón y abanderados", dice Natalia. "Cuando son los actos de protocolo salimos a saludar al público para que sepan que somos nosotros los encargados de prestar un buen servicio para que el partido se lleve a cabo con muy buenas condiciones", añade Gaviria, quien en el partido de la final tuvo que estar pendiente del piso de la cancha.
No es fácil. La atención debe ser completa: deben separar lo emocional de la obligación y así tengan atrás una tribuna que inunda los oídos de los asistentes al coliseo, con un coro que retumba, como el de "Bolívar , Bolívar", la concentración está puesta en el escenario, en el que la selección de voleibol juega la final femenina de esta disciplina en las justas nacionales. Es el segundo viernes consecutivo que el estadio se tiñe de mil colores para demostrar que el deporte es unión, pasión, emoción.
Unos se encargan de mantener el piso en buenas condiciones: son los rapiditos, quienes secan cuando el atleta cae. Siempre pendiente, atento, enfocado en levantarse rápido para no demorar el encuentro. Una labor vital para evitar resbalones. Los recoge balones están en las esquinas , cada uno con un balón siempre disponible, para entregárselo al jugador que saca. Y, por último, los abanderados, que son los que llevan las banderas.
Aunque en muchas ocasiones se les veía la emoción en la cara al equipo de su tierra ganando, nunca se retrasaron en su labor: aplaudían, sonreían, pero la concentración siempre estuvo apuntada a lo que sucediera dentro del terreno de juego. Así fue toda la tarde en la que se disputaron los encuentros que cerraron el torneo de voleibol femenino, que dejó con el título a Bolívar y a Valle y Bogotá ocupando los dos puestos restantes del podio.
El trabajo en equipo, en ambos torneos, funcionó a la perfección. Todo les salió impecable, tanto que las jugadoras siempre tuvieron gestos amables. Hacer parte de estos Juegos del Bicentenario era un anhelo para ellos y lo hacen de la mejor manera. Han respondido a este reto con entusiasmo, empatía y cierran un ciclo de manera exitosa, con el objetivo de mantener en alto todas las cualidades para que los V Juegos Paranacionales brillen a lo largo y ancho del país.
